Estos meses estuve viendo flores y más flores amarillas por todas partes, en parques, en campos, en los bordes de carreteras y caminos... y me puse a investigar ( No puedo evitarlo, veo una planta y ya me pongo a pensar si tiñe o no y qué color saldría jeje). Resulta que este arbusto tan común es la Ginesta , también conocida como Retama de tintoreros. Cuando vi el nombre y la descripción saltaron todas mis alarmas de tintorera¡!
Así que nos agarramos una bolsa y fuimos a buscar unas cuantas florecillas, no costó mucho encontrar un arbusto por lo que os he comentado, es una planta muy común. Por suerte es una flor que se desprende muy fácilmente del tallo, así que no hay que cortar ninguna rama y quiero pensar que es menos dañino para la planta. En un solo arbusto hay muchísimas flores y cuando las recoges solo salen las que ya estaban abiertas, los capullos se quedan agarrados , por lo que no dejamos sin comida a los insectos ( que no eran pocos) Hay que decir que la planta huele de maravilla ( y ahora también mi despensa de tintes).
Cuando ya tuvimos unas cuantas, volvimos a casa corriendo para probar el nuevo tinte. En un principio solo puse 200gr de flores frescas y parecía que el agua apenas tomaba color, así que le añadí el doble, el agua sí que se oscureció un poco así que añadí la madeja de lana y para sorpresa mía quedó un amarillo brillante y claro. Estoy muuuuy contenta, tanto que volvimos a hacer otra excursión recolectora y recogimos más , las secamos y así tendremos flores para el resto de año ( para unas pocas madejas, tampoco hemos arrasado).
Seguro que ahora si veis esta planta la reconoceréis enseguida. No os costará encontrarla ¡ está por todos lados!
